Hotel La Pergola, Amalfi (IT) - Ofertas y Reseñas

Disfruten de los cócteles temáticos de limón en la terraza, son refrescantes después de un día explorando la costa.

Vistas espectaculares desde la terraza, huerto de limoneros, acceso cómodo al transporte público

Las habitaciones son pequeñas y algunas sin ventanas!!! Además, la falta de opciones para cenar cerca puede ser un verdadero dolor de cabeza al estar un poco alejados. noté que el Wi-Fi no siempre fue confiable y eso es un fastidio.

la pergola es un lugar encantador, con habitaciones amplias y limpias. Además, la terraza es perfecta para relajarse entre limoneros. El desayuno casero es variado y delicioso, especialmente la cerveza con limón que preparan. La atención del personal es excelente, siempre amables y dispuestos a ayudar, lo que hace que te sientas como en casa.

lo recomiendo

esperaba una habitación con vistas y me dieron una con ventana a una escalera, encantador, ¿verdad? además, el desayuno que prometían ser delicioso, era un simple buffet. creí que sería especial por ser un huésped exigente, pero claramente no les importó. solo fui un número más, lamentable.

Desayuno delicioso con zumo fresco, y la terraza increíble para ver el atardecer. Personal bien amable, siempre con buena vibra. Camas cómodas, aunque la habitación un poco pequeña. Un poco alejado de Amalfi, pero la vista lo compensa.

Reseña justa

Este hotel destaca por su comida deliciosa y la amabilidad de sus dueños, pero enfrenta desafíos como habitaciones pequeñas y falta de opciones de entretenimiento. Además, está alejado del centro, lo que puede suponer un inconveniente para quienes dependen del transporte público. Sin embargo, los atardeceres en la terraza son una verdadera joya.

Qué delicia de lugar! La terraza del restaurante es un sueño, con vistas al mar y limoneros que te envuelven en su frescura. El desayuno es un festín, zumo de naranja y limón recién exprimidos, frutas y tomates de su propio huerto. Además, la cerveza con limón que preparan es la mejor para refrescarte después de un día explorando la costa.

A pesar de todo, la cercanía a la carretera puede ser un poco incómoda. Aunque una vez estás adentro, casi no se siente. Además, el Wi-Fi no siempre fue confiable, lo que resultó en momentos de frustración.

una experiencia familiar inolvidable gracias a la calidez del personal y la terraza con vistas al mar y limoneros

La Pergola es un lugar donde te sientes como en casa desde el primer momento. La comida es exquisita, con ingredientes frescos, y el ambiente familiar del hotel es indescriptible. La terraza es perfecta para relajarte entre los limoneros y disfrutar de un desayuno con zumo recién exprimido. La amabilidad del personal, siempre listo para ayudar, hace que la experiencia sea aún más especial.

La cena fue deliciosa, aunque la habitación tuvo una ventana a una escalera.

una experiencia familiar inmersiva con un desayuno espectacular y vistas impresionantes desde la terraza del restaurante

Las vistas desde la terraza del restaurante son simplemente increíbles. Disfrutar de un desayuno self-service con frutas frescas de su propio huerto y zumos recién exprimidos es un verdadero placer. El personal es tan amable y siempre dispuesto a ayudar, lo que te hace sentir como en casa. Además, la ubicación es ideal para llegar a Amalfi y a otras playas encantadoras. Mi estancia fue maravillosa y definitivamente volvería.

el desayuno es increíble, con fruta fresca de su propio huerto. el aire acondicionado no funcionaba bien.

La ubicación en un huerto de limoneros es mágica, las vistas durante el desayuno en la terraza son inigualables. El desayuno tiene zumo de naranja y limón recién exprimido, frutas del huerto y un gran ambiente familiar. El personal es increíblemente amable, se siente como en casa. Además, el autobús SITA para llegar a Amalfi está justo en la puerta del hotel.

Un poco alejado de Amalfi, pero la vista lo compensa.

Las habitaciones con vistas al mar ofrecen un ambiente ideal para disfrutar de un atardecer espectacular. La terraza del hotel es amplísima, con reposeras cómodas que permiten relajarse mientras se contempla el paisaje.

La habitación inicial no tenía ventanas, lo que hizo que la primera noche fuera incómoda. Tras un cambio, la nueva habitación daba hacia una escalera, permitiendo que los demás huéspedes nos vieran al asomarnos. Además, el hotel se encuentra alejado del centro, lo que puede ser un inconveniente para quienes no tengan transporte propio.

Disfrutamos de una hermosa vista al mar desde nuestra habitación y la cena fue una delicia, con atención personalizada de un personal muy amable. Sin embargo, el hotel está un poco alejado del centro y tuvimos un inconveniente con la habitación inicial al no tener ventanas. Aun así, la estancia fue agradable.